Responsabilidad humana por su salvación

Muchos creen que no existe tal responsabilidad del hombre por su salvación, que Dios, como tiene control y dominio de todo, es el único responsable tanto de la maldad del hombre como de su bondad. Que Dios hace que el hombre peque y haga el mal o el bien, lo que concideran, está en el plan mismo de Dios. Pero, la Bíblia es clara desde el Génesis hasta el Apocalipsis en cuanto a la responsabilidad que tiene el hombre ante su salvación. Por eso voy ahora solo a citar algunos versículos al respecto:

Ezequiel 18:20: "El alma que pecare, esa morirá; el hijo no llevará el pecado del padre, ni el padre llevará el pecado del hijo; la justicia del justo será sobre él, y la impiedad del impío será sobre él."
Responsabilidad: No pecar

Marcos 16:16: "El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado." Responsabilidad: Creer

Romanos 10:9: "que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo."
Responsabilidad: Confesar; creer.

Romanos 10:13: "porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo."
Responsabilidad: Invocar el nombre del Señor

1 Juan 1:9: "Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad."
Responsabilidad: Confesar

Existen muchos textos bíblicos que podríamos citar para demostrar que sobre la humanidad pesa una responsablididad por su salvación.

Existen muchos textos bíblicos que sustentan la elección divina:

Es cierto, hay textos que podemos interpretarlos como elección incondicional (pensamiento calvinista), pero paralelamente tenemos la elección condicional (pensamiento arminiano). Son dos corrientes religiosas que por años no han logrado ponerse de acuerdo, ya que ambas teorías están en la Bíblia.

Yo llego a la conclusión de que, Dios como soberano, en ocaciones y con propósitos específicos, elige de manera incondicional a quienes Él quiere, pero esto no quita la responsabilidad de la humanidad ni anula la muerte de Cristo por todos, no por algunos.