TENGO ALGO QUE DECIRTE
Pr. Damián Méndez | Predicado el 5/05/2019
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BASE BÍBLICA: Lucas 7:43-46 “Entonces Jesús le dijo a manera de respuesta: —Simón, tengo algo que decirte. —Dime, Maestro —respondió. Y vuelto a la mujer, dijo a Simón: ¿Ves esta mujer? Entré en tu casa, y no me diste agua para mis pies; mas ésta ha regado mis pies con lágrimas, y los ha enjugado con sus cabellos. No me diste beso; mas ésta, desde que entré, no ha cesado de besar mis pies. No ungiste mi cabeza con aceite; mas ésta ha ungido con perfume mis pies.
TEMA: Santidad
ÁREA: Doctrinal
PROPÓSITO: Que los oyentes reconozcan sus condiciones ante Jesús y cambien sus formas de vida.
DISEÑO: Sermón Temático
INTRODUCCIÓN
- Hablar de las tradiciones judías al recibir visitas en casa.
- Lavaban los pies, ungían con aceite, besaban
Oración Transicional: Ahora consideraremos la actitud del fariseo y de la mujer
DESARROLLO
I- ACTITUD DE SIMÓN EL FARISEO
A. Simón no honró la presencia de Jesús en su casa, ya que ni siquiera cumplió con la tradición elemental al recibir una visita.
B. No dio agua para los pies de Jesús
1. Los que se sentían iguales no se lavaban los pies entre ellos
2. El que el anfitrión lavara los pies mostraba hospitalidad y afecto.
3. Es símbolo de limpieza espiritual
a) Si no te lavare, no tendrás parte conmigo (Jn. 13:8)
b) “… y cuando se acerquen al altar para ministrar” (Éxo. 30:20)
C. No le dio el beso
1. Señal de desprecio
2. Lo considera inferior
D. No ungió Su cabeza con aceite
II- ACTITUD DE LA MUJER
A. Regó sus pies con lágrimas y los secó con sus cabellos.
B. No cesaba de besar sus pies
C. Lo ungió con el mejor perfume
Aplicación:
- Entré a tu casa y no has cambiado
- Entré a tu casa y sigues siendo el mismo
- Entré a tu casa y no hablas conmigo
CONCLUSIÓN
Debemos honrar la presencia de Dios en nuestras vidas y en nuestros hogares.
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